MARCH SESSION 2013 Emilia Gonzàlez

Emilia Gonzàlez

Nacida en Buenos Aires, Argentina, en el año 1982. Fotógrafa profesional formada en Buenos Aires, apunta en este proyecto a mostrar la mutación del cuerpo femenino antes y después de la llegada de un hijo. Desde el propio embarazo, intenta describir la transformación física y espiritual que la maternidad genera en la mujer. En la actualidad, reside en Puerto Madryn , ciudad de la Patagonia argentina.

Project for NYBA: "Amaneciendo la mutación"

¿De qué hablamos cuando hablamos de End and Over, del “fin del mundo”? La temática de  la Biennale me lleva a cuestionarme de dónde proviene la idea del fin. Acaso, ¿no todo son  ciclos sobre ciclos sobre ciclos infinitos? Pienso que si pudiésemos detenernos por un instante,  podríamos percibir como los períodos (se) suceden constantemente; el día sobreviene en  noche y la noche en día, las estaciones rotan cada determinada cantidad de tiempo transformando  maravillosamente nuestro paisaje y nuestro hábitat, el ciclo de la vida nos sorprende de igual  manera con todo aquello que posea vida: muerte y nacimiento nos atraviesa, nos sucede, nos  llega y nos toca, nos permite SER. La Madre Tierra vive, vibra, se manifiesta cíclicamente….  Fin es también principio, continuidad, cambio, metamorfosis y renacimiento; es vivir y revivir,  es viajar en una espiral donde no podemos reconocer donde ni cuando comenzó, y desde la  cual sólo nos resta entregarnos profundamente a ese viaje. Con este proyecto, intento expresar  que la maternidad es también una transición, una transformación física, psíquica y espiritual un traspaso, “un fin y un más allá”. La madre alberga vida, entrega su cuerpo a ese nuevo  ser que se canalizará a través de ella: es preciso que haya entrega y amor. Y entonces la  Naturaleza actúa; el vientre se expande, los órganos se acomodan, el centro de gravedad se  desplaza, los senos se preparan para convertirse en el alimento sagrado, la columna vertebral  se fortalece, los pies se asemejan a raíces, el bebé es recurrente en el plano onírico, el 3er ojo  se agranda y la intuición aflora en cada respiración. Luego el alumbramiento llega y ya nada será  igual; cierta parte de esa mujer muere para dar nacimiento a otra nueva mujer, a la madre.  Transformación, mutación, transición, vida y muerte en un mismo instante. Luz y sombra, noche y día en simultáneo. El 2012 ya está aquí, ya está sucediendo… está entre nosotros. Nuevos  seres están llegando y otros están partiendo, el poder de la energía femenina está tan firmemente  enraizada a la Tierra, es tan fuerte como posiblemente nunca antes lo haya sido; los volcanes  nos hablan, se manifiestan, nos dicen que somos fieles reflejos suyos, y que es momento de sacar  afuera lo superfluo para conservar la esencia. La Naturaleza es sabia y actúa en consecuencia.  La Tierra se estremece, se purifica, tiembla para purgarse y desliza una energía por el aire que  nos lleva a igualarnos los unos con los otros: humano con humano- con árbol- con perro- con  humano: somos espejos y nos reflejamos, infinitos. Estamos en medio de una transición, somos  parte de ella. Pero, por supuesto, esta es sólo mi visión… Yo elijo ser de las optimistas, yo elijo  ver una puerta que se abre en lugar de una que se cierra, yo elijo el amor ante el miedo, la vida  antes que la muerte, la esperanza ante la desolación, la idea de transformación ante la idea del fin…  Amaneciendo la mutación como forma de vida, de entrega, de expresión.